Y de fondo suena Sigur Rós.
En ese entonces yo era un volátil adolescente. Todo confluyó en que me enamorara de la película "Into The Wild", de la hazaña de Chris y las ideas que plasmó en papel (y que el tiempo plasmaría en film). En un par de sentidos, también tuve mi propia odisea McCandless el 2008 que me fui de intercambio a Noruega, lugar del que no sabía un pepino y que fui sólo "con lo que llevas contigo" (parafraseando a Yoda). Cuando volví a Chile con la cabeza con decenas de pensamientos dando vueltas, llegó a mis manos una versión muy flaitemente impresa del libro "Into The Wild". El libro se diferencia de la película en que está menos metida en la cabeza de Chris y no intenta explicar por qué hizo lo que hizo, sino que intenta seguirle los pasos, los aventones, los trabajos que tuvo, y el cómo llegó a parar al Magic Bus 142.
Con libro y madurez en mano (¡hahaha!), comencé a darle un par de otras vueltas a la película y que quizá Chris no era el héroe que sentí al principio, la persona incomprendida en un mundo cruento que se quería arrancar de todo para conocer su propia verdad. No fueron pocas las noticias que vinieron post-2007 de personas que inspiradas por "Into The Wild" se fueron a Alaska, Yukon o algún parque nacional y se perdieron o se murieron por inexperiencia. Después de 4º Medio y entrar a la U, olvidé la película, las reflexiones de Chris y todo lo relacionado a "Into The Wild" y los locos delirantes que creían en ella.
Hasta más o menos la semana pasada, que no sé por qué me acordé de ella y decidí descargarla y verla de nuevo...por primera vez en harto.
Así, a nueve años de haber sido expuesto a la historia de Christopher McCandless, el Magic Bus 142 y el verano de 1992, acá un par de párrafos respecto a qué siento ahora respecto a su odisea allá en Alaska.
Y eso no es Alaska, es Noruega.
"Return To The Wild" es un documental inspirado en el libro de Carine (hermana de Chris), que intenta explicar el otro lado de la historia: qué pasó en la familia McCandless para que todo acabase como lo hizo. Lo primero que me llama la atención es el tema doméstico. La película hace breves menciones a que Walt [el papá] es un abusador y la voz en off de Carine algo menciona el tema marital, cuando yo siento que son temas mucho más profundos y relevantes y que NO se toman con la seriedad que se debiera. Efectivamente Walt estaba casado al conocer a Billie [mamá de Chris] y no se le arrugó la cara al casarse de nuevo porque él era un tipo super cool que trabajaba para la NASA. Mientras Familia I llegaba apenas a fin de mes porque a Walt le importaba un comino, Familia II al vivir en un área suburbana de Los Angeles tenía que verse y sentirse todo perfectito, así Chris y Carine crecieron con todos los lujos que un par de pendejos podían pedir pero sabiendo que estaba Familia I donde él no ponía ni uno, y para más remate los hermanos veían como su papá le sacaba la mierda a su mamá. Walt estaba 15 días con Familia I, y luego 15 con la familia de Chris y cuando estaba le pegaba a Billie; obviamente eso trajo sus consecuencias en el comportamiento del cabro.
La película es enfática en que él odiaba el materialismo y superficialidad de la sociedad, las cosas caras y cuicas...pero más parece que le apestaba el que Walt tratase al mundo como un objeto, como un CV o algo para ostentar, y que Billie lo permitiese. En el documental Carine cuenta que el arrancarse de casa iba a ser una lección para sus papás, para que se pegasen los alcachofazos de qué es lo realmente importante en la vida y que él al volver a casa, pudieran entender eso y cambiar para mejor. Nótese: volver a casa.
Los sentimientos de Chris pueden resonar fácil en varios: querer arrancarse de la rutina, de sentir que todo son números e irnos a un lugar prístino y ser uno con el cosmos para responder las preguntas que tenemos, y las imágenes de los alces corriendo en la Alaska estival ayudan a motivar eso. Sin embargo, es vital no ignorar el hogar desde donde él venía y que él sabía de dónde venía. La película habla mucho de las cosas que pasaban dentro de su cabeza, pero no hacerse los lesos con lo que pasaba fuera de ella también. Carine es tan hippie como su hermano pero ella no quiso arrancar de casa e irse a Alaska a dedo.
El verdadero Magic Bus y el verdadero Stampede Trail.
Y ya, le respeto (en serio, lo hago) sus deseos de querer arrancarse de las ataduras del mundo civilizado, pero por muy idealista que sea tu mente...debes entender que aún vives en el mundo real donde la gravedad es 9,81 m/seg², el agua se congela a 0ºC y tienes que ser precavido con las cosas que empacas. El verano polar se puede ver muy bonito y todo, pero es cortísimo y la posibilidad de que el clima te mande todo al carajo es alta. El día Nº66 de su aventura en Alaska le pasó la cuenta brutalmente: luego de haber hallado las respuestas que él buscaba, empaca todo y decide devolverse por Stampede Trail sólo para darse cuenta que el Savage River vive a su nombre. Y cagó po.
Además de estar de acuerdo en que sus penurias eran evitables con un poco de planificación, también estamos de acuerdo en que no tenemos idea de cómo murió realmente. La película habla que cometió un error fatal al confundir plantas y murió intoxicado, mientras el libro dice que el mono-consumo de carne de conejo (que tiene un mínimo contenido de grasa, ergo de energía) lo llevó al debilitamiento extremo e inanición; la supuesta confusión de plantas fue sólo una agravante donde su cuerpo sencillamente pedía a gritos un poco de energía que nunca llegó y murió de ello.
"He vivido una vida feliz y le agradezco al señor. Adiós y que Dios los bendiga".
...todo eso para morir. Solo. Es tragicómico que una historia que empieza mal y llega a un clímax borderline-solemne, culmina en un desliz geográfico y se lleva la vida de este flaco. ¿Fue necesario hacer todo este viaje a Alaska? La verdad siento que sí. Yo terminé respondiéndome su par de dudas existenciales cuando me fui de intercambio a Escandinavia (dos veces). Quizá tengo un poco de Christopher McCandless en mí. Salir del ambiente en el que estamos (sea este rutinario o derechamente tóxico como el de la familia de Chris) y como dice por ahí una de las citas de la película, "no sólo ser fuerte, pero sentirse fuerte". Es la lección que le daría al Javier de hace nueve años atrás en el debriefing luego de que viese por primera vez "Into The Wild".
Saludos a Kristen Stewart, que antes que el mundo la conociera como Isabella Swan en "Twilight", yo la conocí en "Into The Wild".
